
La pureza del blanco absoluto es como un lienzo en el que plasmar los pensamientos de uno, abriendo la mente a nuevas interpretaciones proyectivas. Una superficie semimate, suave al tacto, se enriquece con gravas cristalinas que embellecen la gama de decoraciones florales multicolores, tropicales y geométricas para explorar el mundo del hiperdecorativismo. Un revestimiento de formato grande con el que realizar
fondos escenográficos que coordinar con otros monocolor.