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Por un lado está el parqué de madera, con su elegancia atemporal y una sensación acogedora muy natural. Por el otro, el gres porcelánico, un compuesto de arcilla, arena y minerales, cuyas ventajas residen especialmente en su versatilidad y resistencia, así como en la capacidad de aportar un toque de elegancia adicional a todos los espacios.
En este artículo analizaremos las características de ambos materiales, las ventajas y desventajas de cada uno y las diferencias que presentan. ¡Elegir el suelo y los revestimientos adecuados para nuestros espacios, tanto si son residenciales como comerciales, es un momento estimulante y crucial que conviene afrontar disponiendo de toda la información útil!
Parqué: características y ventajas
Cuando hablamos del parqué, enseguida pensamos en una cosa: la continuidad en la colocación y la ausencia de juntas, lo que hace que los espacios parezcan más grandes.
Por su aspecto natural y cálido, la madera utilizada en el parqué es principalmente de roble, arce y nogal. Estos tipos de madera se han seleccionado por su dureza y por la belleza del veteado.
En el caso del parqué, sin embargo, hay que tener en cuenta una característica fundamental: aunque se trata de un material conocido por su duración, necesita cuidados periódicos para conservar su aspecto y resistencia. Es aconsejable tratar la madera con aceite y barnices de protección, prestando especial atención a los arañazos y otros desperfectos.
En entornos residenciales, las características del parqué hacen que sea adecuado para el ámbito del salón y los dormitorios, mientras que está poco indicado para ambientes húmedos como el baño y la cocina.
Gres porcelánico imitación madera: características y ventajas
Para resolver todos los límites que plantea el parqué sin tener que renunciar al efecto elegante y acogedor que este material aporta a los ambientes, existe el gres porcelánico imitación madera.
Gracias a la tecnología más moderna, el gres porcelánico se crea mediante un proceso de impacto medioambiental reducido. El resultado es un material resistente y versátil, capaz de reproducir fielmente el aspecto de la madera natural, con sus veteados, nudos y matices cromáticos.
Sus características hacen que sea un producto excelente a la hora de combinar la estética de la madera con una mayor practicidad de mantenimiento. En efecto, el gres porcelánico es muy resistente al rayado, las manchas y la humedad, por lo que es idóneo tanto para el dormitorio y los demás espacios de la zona de noche, como para los ambientes húmedos y de uso intenso, donde su robustez representa una ventaja significativa en términos de durabilidad.
Diferencias principales entre el parqué y el gres porcelánico imitación madera
Como hemos visto, cada uno de estos materiales tiene sus ventajas y desventajas. Su elección dependerá principalmente del uso previsto y de las prioridades durante el diseño del proyecto.
La diferencia principal entre ellos radica en el material utilizado: el parqué se fabrica con madera natural, mientras que el gres porcelánico es un material cerámico. Habida cuenta de esta distinción, es fácil entender que influirá en varios aspectos tales como la sensación al tacto, la estética y la necesidad de mantenimiento.
Uno de los puntos más importantes que hay que considerar es el rendimiento estético final. Gracias a las tecnologías más innovadoras, es posible producir un gres porcelánico que imita la madera con gran realismo y al mismo tiempo ofrece una amplia gama de acabados y colores. ¿Un ejemplo? Descubre nuestra colección Ossimori, un dulce recuerdo del parqué de antaño.
El gres porcelánico imitación madera también representa una opción más ecológica que el parqué, dado que necesita menos mantenimiento y sustituciones a lo largo del tiempo.
¿Cuándo optar por el parqué o por el gres imitación madera?
Ahora que conocemos las características y diferencias entre el parqué y el gres imitación madera, la elección del material más indicado para los revestimientos y el suelo de la cocina resulta más simple. Piensa atentamente en tus necesidades, tus costumbres y el valor estético que quieres aportar a los espacios.
El parqué es idóneo para los ambientes donde tienen prioridad el confort y la elegancia, pero requiere un mantenimiento ordinario más complejo y corre el riesgo de estropearse fácilmente.
Si tu objetivo es crear un ambiente acogedor y elegante, pero sin renunciar a la funcionalidad, el gres porcelánico imitación madera es la opción ideal para todos los casos. Se adapta perfectamente a los espacios interiores y exteriores, residenciales y comerciales, y se mantendrá íntegro en cualquier situación.
En Ragno descubrirás nuestras colecciones especiales, caracterizadas por una belleza imperecedera: Boheme, disponible en cuatro variantes de color; Inedito, que capta las tonalidades naturales de la madera de roble; Woodsense, para conseguir un efecto más rústico.
Para consultar la oferta completa y completar tus espacios con un suelo único, ¡inspírate en Ragno!