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Un proyecto de reforma extraordinario, realizado por el estudio de arquitectura Parramon + Tahull arquitectes, que ha transformado un espacio de 160 m² en la planta baja de un edificio de los años 50, ubicado en el animado barrio Sants de Barcelona. Con este proyecto recobra vida una zona que originalmente estaba formada por una casa y una tienda, pero que se había deteriorado mucho con el paso del tiempo a causa de la humedad y la falta de mantenimiento.
El espacio presentaba varias carencias: el patio interior grande estaba cubierto con un techado de fibrocemento que le quitaba luz y ventilación natural, y la estructura entera necesitaba mucha obra. Sin embargo, la gran promesa del proyecto podía entreverse en algunos elementos clave: el gran patio trasero, la amplia abertura de la fachada y la altura notable de los espacios.
En primer lugar, había que recuperar el patio, desmontando el techado de fibrocemento para mejorar la iluminación y la ventilación. La abertura de acceso se amplió para facilitar la comunicación entre el interior y el exterior e incrementar la luz disponible. El sistema de desagüe subterráneo se renovó por completo y se reemplazó por un nuevo suelo de hormigón. Se quitó el enlucido de las paredes para descubrir los ladrillos caravista y eliminar los problemas de humedad.
Se modificó la organización planimétrica, eliminando pasillos y creando conexiones visuales entre los espacios, que ahora se comunican por medio de puertas correderas de madera. Al estar ubicado en la planta baja, se prestó especial atención para aumentar al máximo la iluminación natural de todos los espacios.
A las paredes de ladrillo caravista se les aplicó un tratamiento mediante esmalte blanco para mantener la textura del material. Los acabados se eligieron cuidadosamente para crear un ambiente depurado, ordenado y atemporal.
Para el suelo, se optó por azulejos de gres porcelánico de 20×20 cm de la colección Contrasti, de color Bianco y Celadon, con predominio del blanco para reflejar la luz. Esta colección se realiza con la innovadora tecnología StepWise, que garantiza una superficie suave al tacto y elevadas propiedades antideslizantes, por lo que es una solución ideal no solo para espacios residenciales, sino también para los entornos comerciales más exigentes. Las puertas de madera a la vista y los armarios de color lacados son un aporte de calidez y contraste al proyecto.
Todo el espacio, tanto la tienda como la vivienda, se ha diseñado para garantizar una ventilación transversal y una climatización eficiente. La calefacción y la refrigeración se obtienen mediante una bomba de calor y canalizaciones, con unidades externas instaladas en el tejado del edificio.
Este proyecto no solo ha transformado un espacio degradado en un ambiente acogedor y funcional, sino que ha conservado y valorizado los elementos arquitectónicos originales, integrándolos con soluciones modernas y sostenibles. La obra ha mejorado significativamente la sostenibilidad del edificio, aumentando su eficiencia energética y reduciendo el impacto medioambiental.
Fotos: Judith Casas Sayós
